EL COMIENZO Y EL FINAL
Capitulo 23 - El súper papa de Sasuke
Raikage: Hemos venido ha…
El Raikage fue interrumpido por la coz de un niñito.
Taigaken: Papi, quiero ir al baño.
Sasuke cogió en brazos a los gemelos, para que Naruto se levantara.
Naruto: Discúlpenme un momento. Vamos Taigaken.
Naruto llevó a su pequeño azabache de la mano hasta el baño, por las noches aun usaba el pañal, pero por el día pedía ir al baño. Naruto le bajó los pantaloncitos y lo sentó en el váter. Mientras tanto en el salón había un silencio incomodo, lo Kages estaban sentados en el sofá y en los sillones, Sasuke los miraba con ojos amenazante, el ambiente era tenso. El pequeño Taigaken hizo sus necesidades, y su papi lo limpió. Los dos se lavaron las manos, jugueteando con ellas. Volvieron al salón, mirándose entre ellos y sonriendo.
Taigaken: Papa ¿te pasa algo?
Sasuke: No hijo, ven, siéntate.
Sasuke mostró ante él un temple serio y tranquilo, aunque no lo estaba. Naruto y Taigaken se sentaron en la manta. Los Kages empezaron a hablar, intentando que las cosas estuvieran calmadas.
Tsunade: Hemos estado hablando, te debemos mucho Naruto, y si fueran otros seguramente abríamos sido más crueles.
Mizukage: Tus hijos a pesar de desarrollarse antes que los demás, siguen siendo unos niños.
Raikage: No eran ningún peligro.
Naruto: ¡Peligro!
Sasuke: Mis hijos serán nobles, y no atacaran a nadie inocente.
Tsunade: Cálmate Sasuke, sabemos que los cuidareis bien y les enseñareis los valores de la vida.
Tsuchikage: Pero aun así no son como los demás y queremos estar al tanto de su desarrollo.
Sasuke: ¿Qué queréis decir?
Dijo con actitud severa. Taigaken se levantó y fue corriendo a subir las escaleras. Todos lo siguieron con la mirada.
Sasuke: Ten cuidado Taigaken.
Taigaken: Sip.
Naruto: Seguir.
Gaara: Solo queremos saber si hacen algún desarrollo importante. Si lo hay Tsunade no informara, y como también venimos alguna vez, vemos ese desarrollo.
Naruto: ¿Solo eso?
Tsunade: Si.
El pequeño bajo las escaleras, corriendo al salón. En sus manitas traía una espada de plástico que le regaló su padre.
Taigaken: Pelea conmigo Gaara-san.
Gaara: (gotita) ¿Por qué quieres pelear conmigo?
Taigaken: Porque habláis mucho y me aburro.
Gaara: Pero Taigaken yo…
Sasuke: (Sonrisa de medio lado) Venga mapache, no tengas miedo de pelear contra mi hijo.
Gaara: No quiero hacerle daño si soy muy brusco.
Naruto: Tranquilo Gaara, no le haras nada.
Gaara se levantó resignado, Sasuke le tiró a las manos una espada igual a la del pequeño azabache, pero más grande.
Gaara: Yo no soy de espadas.
Taigaken: Vamos a pelear al jardín.
Taigaken cogió la mano libre de Gaara y lo arrastró hasta el patio. Los demás los siguieron, Naruto cogió a Toshiki, para que Sasuke no cargara con los dos mellizos. Se sentaron en el porche para disfrutar del espectáculo.
Taigaken: Haré todo lo que me has enseñado papa.
Sasuke: (Sonrisa de medio lado) Demuéstrales como pelea un verdadero Uchiha.
Naruto: (gotita) Tienes que dejar de hacer eso, me empezáis a recordar a Gai-sensei y Lee.
Sasuke: (¬¬)
Tsunade le salió una risilla por el comentario de su nieto. Gaara y Taigaken se pusieron en posición para pelear, la diferencia de altura era un problema para Gaara, pero no para el ojinegro, que peleaba todos los días con su padre. Empezaron a chocar las espadas uno contra el otro, Taigaken notaba la gran fuerza superior de Gaara. EL pelirrojo lo veía fácil, aunque es que luchaba con un niño. Gaara en un movimiento le tiro la espada, este ya se daba por el triunfados, pero Taigaken dio una voltereta por debajo de su piernas, volviendo a coger su espada y clavándola en la espalda de Gaara.
Taigaken: Te gane Gaara-san.
Todos los Kages se quedaron sin habla.
Sasuke: (sonrisa de medio lado) Je, si fueran espadas de verdad estarías muerto mapache, no subestiméis a mi hijo, te ha ganado gracias a su técnica.
Taigaken tiró la espada al suelo y corrió a abrazar a su papa, teniendo cuidado con su hermanito Ryuta.
Taigaken: ¿¡Te ha gustado papa!? ¿¡Lo he hecho bien!?
Sasuke le revolvió el cabello, sonriéndole tiernamente.
Sasuke: Lo has hecho mejor de lo que esperaba.
Naruto: Has estado genial.
El pequeño azabache tenía una alegría infinita por los comentarios de sus padres . Le dio un beso en la frente a Ryuta.
Taigaken: Tu hermano te protegerá siempre.
El pequeño pelirrojo sonrió. Taigaken abrazó a Toshiki.
Taigaken: Toshiki estaré siempre a tu lado.
Taigaken cogió las manitas de los mellizos, la escena era muy tierna, y de una familia realmente feliz. De repente los pequeños mellizos notaron algo, y empezaron a moverse nerviosos. Entonces llamaron a la puerta.
Gaara: Ya voy yo, los pequeños están algo inquietos.
Gaara fue a abrir la puerta, aun pensando que había sido derrotado por un niño de 2 años. Al abrir la puerta se encontró con Iruka-sensei y Kakashi-sensei.
Iruka: Hola Gaara.
Saludó animadamente Iruka, Kakashi levantó la mano a modo de saludo. Gaara les indicó que entraran, encaminándose al patio.
Kakashi: ¡Están aquí los Kages!
Taigaken: ¡Abuelo Iruka, Kakashi-san!
Taigaken subió al porche y corrió hacia ellos, abrazándolos.
Iruka: Hola Taigaken.
Dijo con una sonrisa, Kakashi se puso de cuclillas.
Kakashi: Taigaken, te he dicho que también me llames abuelo.
Taigaken: ¡¿Habéis venido a ver a mis hermanito!?
Kakashi: (T.T) “No me hace ni caso”.
Iruka: Espera ¿¡no es uno solo!?
Naruto: Son 2 mellizos.
Taigaken cogió sus manos y los atrajo hasta los bebes.
Kakashi: Pelirrojos como Kushina ¿he?
Naruto: Si, me alegro que tengan algo de mi madre, tebayo.
Iruka: Son muy monos, tienen los ojos negros noche y tus marquitas.
Naruto: ¿Quieres cogerlo?
Iruka: Dame.
Taigaken: Ese es Toshiki, el mayor, y el otro es Ryuta.
Ryuta empezó a ver como su hermano se alejaba poco a poco de él y comenzó a llorar otra vez.
Kakashi: ¿Qué le pasa?
Naruto: Porque hemos alejado a Toshiki de él.
Sasuke puso a su niño en su pecho, el pequeño desahogaba su llanto en el cuello de su padre, que lo abrazaba y le acariciaba su espalda con cariño.
Sasuke: Shss, ya está mi llorón, papa está aquí.
Kakashi: (ojito feliz) ¿Quién creería que fueras tan buen padre?
Taigaken: ¡Papa es el mejor!
Las tripas de Naruto empezaron a rugir. Naruto miró a Sasuke con ojos de cachorrito.
Sasuke: (suspiro) Voy.
Taigaken: Papa ¿se pueden quedar todos a comer?
Sasuke: ¿Eso quieres?
Taigaken: Sip.
Sasuke: Esta bien “por él tendré que aguantar a todos estos, pero bueno, es feliz”
Taigaken: ¡Viva!
Sasuke fue a la cocina y sentó a Ryuta en una de las tronas rojas que encargó. Sabía que si alejaba su niño de él en ese estado, volvería a llorar. Empezó a cocinar merluza al horno, Ryuta estaba pendiente de él y de que no se fuera muy lejos.
Mientras tanto en el porche:
Mizukage: El amenazante Uchiha consiente a sus hijos.
Naruto: Es un amargado, pero con sus niños…
Taigaken: Papa dice que quien trabaja duro luego tiene una recompensa, por eso yo entreno todos los días con él.
Tsunade: Eso está bien.
Raikage: Lo mal cría al consentirlos tanto.
Sasuke: ¡Taigaken! (Grito desde la cocina)
Taigaken: Venga papi hay que poner la mesa.
Gaara: A mí me parece que los tiene muy bien educados.
Colocaron la mesa y pusieron otra. Se sentaron a su alrededor, en la cabecera estaba Sasuke, a su derecha tenía a Taigaken y Toshiki en su trona, al lado de este estaba Naruto, y a su izquierda estaban Ryuta, Kakashi e Iruka, en la otra mesa estaban lo Kages sentados. Sasuke sirvió la comida.
Sasuke: Tranquilos, no la he envenado.
Naruto: (gotita) No creo que ahora se sientan seguros.
Sasuke: Hmm.
Taigaken: Jo papa, no quiero potitos quiero tu comida.
Sasuke: Taigaken sabes que aun eres muy pequeño y esto tiene espinas, te podrías hacer daño.
Sasuke le susurro al oído.
Sasuke: Después de comer nos comemos medio tomate.
Taigaken: ¡Vale!
Sasuke le empezó a dar de comer el pitito. Naruto empezó a comer y los demás lo siguieron. Ryuta empezó a lloriquear porque su papa no le hacía caso. Sasuke lo puso en su regazo.
Sasuke: Ya estas con papa; abre la boca Taigaken.
Taigaken: Aaah.
Toshiki sin embargo miraba a su papi, que de vez en cuando le empezaba a hacer cosquillas.
Kakashi: (Ojito feliz) Que bien os las apañáis, ¿quién lo diría?
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